Había una vez una niña llamada Caperucita roja. Un día su mamá: le dijo que, llevara una cestita con manteca queso, miel y gran pastel, a la abuelita que se encuentra resfriada, y ten cuidado porque en el bosque vive un lobito muy travieso…
Oh, abuelita dijo Caperucita, abuelita, abuelita que ojos más grandes tienes…son para verte mejor. Abuelita, abuelita que orejas tan grandes tienes…son para oírte mejor…. Abuelita, abuelita con manos tan grandes tienes… son para abracarte mejor… abuelita, abuelita que boca tan grandes tienes… es para comerte mejor…
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